Pase lo que pase, son dos pedazos de la historia del remo. Porque deslumbraron en Guadalajara, porque seguro que van a estar en Londres haciendo ruido, porque no pasan desapercibidas en Tigre aunque no les toque competir, pero principalmente porque son dos personas de las que no abundan en estos niveles de la elite deportiva. Está claro que no soy un periodista que se especialice en la materia, ni siquiera soy un espectador con antecedentes en el remo, pero tenerlas a ellas como "maestras particulares" al menos por un rato sin duda ayuda bastante.
Sin tener idea de quien soy, y pese a las molestias por mail o twitter, me regalaron un rato de su mañana en el Tigre al borde de la Pista Nacional con una generosidad impensada y que agradezco eternamente. Más allá de los gestos, lo que uno se lleva es que se las ve compinches, serenas, con seguridad, con ganas y creo que hasta con la cuota de ansiedad necesaria para que las cosas salgan del mejor modo. El camino a Londres todavía se está transitando. Falta la gira europea. Pero no están lejos.
Hoy Laura no pudo entrenar, Gaby creo que tampoco, sin embargo se las veía distentidas disfrutando del ambiente, de la vuelta a las regatas del novio de Gabriela, sacando fotos y saludando a quien quiera charlar un rato con ellas. Mate y facturas mediante, quizás mañana tenga otro rato mano a mano con dos grandes del deporte nacional que van con paso seguro camino a los Juegos.
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